Introspecció al dement romàntic

Lejano, como una vieja canción olvidada, que ya de nada valen esas lágrimas perdidas en el tiempo de cuentos de ángeles y demonios hechos de la impotencia. Palabras, historias desgastadas por la verdad que se consume entre prisiones del presente. Y, como una flor que se esconde de la noche, vives entre deseos y un cielo, gris de temores, vampiros etereos de tus mentiras. Soñaras hoy, como única esperanza, aunque estés solo y falto de cadenas que te aten a la vida. Sera ahora, levanta tu propio mar interior, naufrago de un corazón esclavo, aun queda, la nada como máximo exponente de esta lucha por mantener la aguja que sostiene esta vida pesada, lejana, como una vieja canción olvidada...

De otros tiempos rota, un alma volara, Buscándote, perdiéndose..